La División Transporte de la Intendencia de Montevideo informó por intermedio de la red social X que se investigará el caso de una joven de 18 años que denunció haber sido abusada por un taximetrista, tras un viaje efectuado aproximadamente hace un mes atrás en Montevideo. Al respecto, la dependencia de la comuna publicó: “Ante los hechos denunciados en nota de prensa sobre un caso de presunto abuso sexual de un taxista a una pasajera, queremos informar que la Intendencia de Montevideo tomó conocimiento del tema a través de dicho artículo y está realizando las consultas pertinentes con Asesoría Jurídica para analizar los pasos a seguir”.

Por el mismo asunto, el Sindicato Único y Autónomo de los Trabajadores del Taxi (Suatt) emitió un comunicado a la opinión pública para referirse a la denuncia contra el taximetrista de 27 años, que fue divulgada en una nota de Montevideo Portal.

El Suatt expresó que “los trabajadores y trabajadoras del taxímetro nos vemos en la necesidad de expresar nuestra opinión. Nos solidarizamos con la pasajera que vivió esta situación que caracterizamos de repudiable y rechazamos enérgicamente. No seremos cómplices de este tipo de conductas que no nos representan”.

La gremial señaló también que “estos hechos son producto y consecuencia de una sociedad machista y patriarcal que promueve estas conductas y debemos combatirlas enérgicamente”. Explican, además, que “desde el sindicato se viene abordando este tema y se ha logrado con la Intendencia de Montevideo visualizarla necesidad de avanzar en diferentes políticas que apunten a combatir las situaciones de abuso y acoso en el sector, son necesarios protocolos en varias direcciones y su implantación de forma urgente”.

Expresó, además, que “se planteó en la Intendencia de Montevideo la inclusión de aspectos educativos que representen herramientas para enfrentar situaciones de este estilo”, y prevenirlas para que las mujeres puedan trabajar y viajar seguras. “Es de vital importancia para nosotros como trabajadores del taxímetro avanzar en estos aspectos, algo que trasciende lo estrictamente laboral”.

“Nos sentimos en el deber y obligación de reclamar, construir y conquistar las condiciones en el sector para que tanto una trabajadora se pueda desempeñar laboralmente, como las usuarias del taxímetro sentirse seguras de viajar en taxi”, continuó el sindicato.

“Condenamos estas conductas que se encuentran en las antípodas de lo que representamos como trabajadores organizados. No hay lugar entre nosotros para individuos carentes de valores humanos. En ese sentido, no contarán con nuestra aprobación y encontrarán en nosotros una actitud activa en el sentido de impedir su desarrollo”, concluye la declaración.

Consultado por la diaria, Carlos Silva, secretario general de la organización, prefirió no brindar más comentarios al respecto.